Y es que en las últimas jornadas de la SECEM, celebradas la pasada semana en Avilés, el visón europeo ha tenido un papel más que discreto. Únicamente una ponencia (de un total de 84) se preocupó de sus desventuras. Y eso que los carnívoros siguen centrando la atención (41 de 84, casi la mitad).
¿No era esta una buena oportunidad para compartir experiencia y resultados?